Mary Ann Moreno demandó la tienda de conveniencia tras despedirla por impedir un asalto en una tienda en la periferia de Denver.

Una cajera de 72 años fue despedida de un minisúper en Westminster, en la periferia de Denver, Colorado (Estados Unidos) después de que se defendiera de un hombre que estaba armado con un cuchillo y robaba la tienda, según una demanda presentada en Colorado. La compañía la despidió injustamente después de que ella ejerció su “derecho a la legítima defensa”, según la demanda.

Mary Ann Moreno estaba trabajando sola en el Circle K Sheridan en Westminster, Colorado, la noche del 4 de octubre de 2020, según la demanda. Un hombre entró con dos grandes cuchillos de caza alrededor de las 19:00 horas, según la demanda. Él “exigió” un paquete de cigarrillos, y cuando ella trató de cobrarlos, él le dijo que se los diera “gratis”, dice la demanda.

Ella dijo que no podía darle los cigarrillos gratis y él se puso “visiblemente molesto”, dice la demanda. Luego caminó hacia el área detrás del mostrador donde estaba parado Mary Ann y se acercó a una vitrina de productos de tabaco, según la demanda. Extendió la mano hacia un paquete de cigarrillos y ella “instintivamente” levantó las manos para “protegerse y evitar que el hombre se acercara a ella y a la mercancía”, dice la demanda.

El video de vigilancia de la tienda muestra que ella toca el brazo del hombre con ambas manos mientras dice: “No vuelvas aquí”. Un empleado de registros del Departamento de Policía de Westminster confirmó que el hombre fue acusado de tener un cuchillo esa noche. Fue arrestado y acusado de múltiples delitos, incluido robo agravado y amenaza con un arma mortal, dice la demanda.

Después de que el hombre salió de la tienda y llegó la policía, Mary Ann estaba “increíblemente angustiada” mientras hablaba con los oficiales, dice la demanda. Una supervisora ​​que llegó a la tienda más tarde esa noche se molestó con Moreno y dijo que tendría que ser investigada por empujar al hombre, dice la demanda.

Dos días después, el supervisor la despidió su empleo, dice la demanda. Iris Halpern, quien representa a Mary Ann, dijo a que su clienta temía por su seguridad durante el robo y que no debería haber sido sancionada por su reacción.

“Las empresas deberían valorar más la vida de sus empleados y entender que en una situación de peligro físico, un empleado tiene derecho a defenderse si tiene miedo de ser atacado”, dijo.

Perder su trabajo en ha impactado negativamente la vida de Mary Ann, según la demanda. Ella trabajó en la tienda durante unos 16 años y para ella era más que un trabajo, dijo su abogada.

“Lo que más le molesta es perder su trabajo”, dijo. “Era extremadamente leal y amaba a sus clientes”.

El esposo de Mary Ann murió hace años y, para ella, trabajar ha sido una salida social, dijo Halpern.

“Era su forma de interactuar y socializar con el mundo”, dijo.

Aunque desde entonces ha encontrado otro trabajo como cajera, todavía teme por la seguridad de su trabajo, siente “pánico” mientras trabaja y le preocupa que la despidan en cualquier momento, dice la demanda. También gana menos y tiene menos beneficios en su nuevo puesto que la anterior empresa, según la demanda.

La demanda busca daños y perjuicios por el dolor y el sufrimiento emocional, los inconvenientes, la angustia mental y la pérdida del disfrute de la vida de Moreno, según la demanda. También busca daños económicos y honorarios de abogados por un monto a determinar. Halpern dijo que espera que esta demanda aliente a las empresas a cambiar sus políticas sobre cómo los empleados deben manejar situaciones potencialmente peligrosas en el trabajo.

“Creo que tiene que haber más matices en estas políticas en toda la industria que penalizan a los empleados por involucrarse con sus posibles agresores”, dijo. “Los trabajadores tienen derecho a la legítima defensa. Tienen derechos de víctima. Eso no cambia cuando están en el lugar de trabajo”.

Con información de Excelsior